El
Parlamento autonómico avala la Iniciativa Popular antitaurina, que
con 180.000 firmas pedía la abolición de la tauromaquia en ese
territorio. El debate ha trascendido el enfrentamiento entre
protaurinos y amantes de la 'Fiesta', ya que algunos sectores sitúan
la decisión como un gesto de desafección de Cataluña hacia España.
Las corridas de toros son historia ya en Cataluña. Ante la
expectación generalizada entre toda la prensa del mundo, el Parlamento
de la comunidad autónoma española ha aprobado la histórica
prohibición de la llamada
Fiesta Nacional por 68 votos a
favor, 55 en contra y 9 abstenciones. Después de un año y medio de
discusiones, intercambio de razonamientos y graves acusaciones, la
Iniciativa Legislativa Popular que presentó una plataforma antitaurina
catalana, con el aval de más de 180.000 firmas, ha salido adelante.
Prohibir
los festejos taurinos en España es casi como prohibir la bandera
nacional para un importante sector de la población, mientras que para
otros es acabar con un espectáculo cruel con los animales. Las
posturas eran irreconciliables y hasta dentro de los partidos no
tenían claro cual debía ser el criterio interno que debían seguir en
torno a una cuestión tan polémica para los españoles. Así, los dos
partidos mayoritarios del arco parlamentario catalán, el gobernante
Partido Socialista de Catalunya y el principal partido opositor,
Convergencia i Unió, han decidido dejar libertad de voto a sus
diputados ante la imposibilidad de adoptar un criterio común en sus
partidos.
Así, las reacciones tras la votación han dejado al
descubierto el antagonismo y las pasiones que levanta la prohibición
de los toros. A la salida del Parlamento autonómico, dos cordones
policiales separaban a defensores y detractores de la medida, que han
intercambiado gritos. “Traidores, traidores”, gritaban ofendidos los
manifestantes protaurinos..
En casos como estos o suelo decir... a cada uno le huele bien el pedo de su culo, asi que neutral ante esto