El mítico modelo de BMW celebra este año sus bodas de plata, convertido en un ícono de la firma bávara, y en uno de los deportivos más exitosos en el mundo, tanto en ventas a clientes como en los circuitos. De hecho, hace sólo un mes se impuso en las 24 Horas de Nürburgring.BMW se apronta a celebrar los 25 años del M3, uno de los deportivos más emblemáticos y exitosos de la industria, que debutó como prototipo en el Salón de Frankfurt de 1985 y llegó a producción al año siguiente, para luego homologarlo en el Grupo A de las carreras de turismos.
Desde sus inicios, el deportivo derivado de la Serie 3 destacó por su alto desempeño, tanto en la calle como en los circuitos, un legado que ha mantenido en sus cuatro generaciones, aumentado su potencia, cilindrada y performance.
El modelo original destacaba por su carrocería coupé y el clásico frontal con cuatro focos, que le daban un aire sobrio, pero agresivo a la vez. Venía equipado con un motor de cuatro cilindros y 2.3 litros, que erogaba 200 caballos y le permitía alcanzar los 100 km/h en menos de siete segundos y una velocidad máxima de 235 km/h.
Más tarde sumaría una variante descapotable de cuatro plazas, la más rápida del mundo en ese entonces, y luego dos ediciones especiales, denominadas Evolution y Sport Evolution. La primera utilizaba el mismo motor del M3 convencional, pero con 215 caballos, mientras que la segunda montaba un 2.5 litros con 238 Cv.
NACE EL SEIS CILINDROS
En 1992 llegó el cambio generacional con el E36, modelo que estrenaba un diseño actualizado y un nuevo motor de seis cilindros en línea de tres litros y 286 caballos de fuerza.
Dos años más tarde, BMW presentó las variantes Cabrio y sedán, esta última equipada con un nuevo motor de i6 3.2 litros y 321 Cv. Con este bloque, el 0 a 100 km/h bordeaba los cinco segundos y alcanzaba los 250 km/h de velocidad punta (limitada). En 1995 debutaría la versión GT (295 Cv), destinada a homologar el modelo para la IMSA GT en Estados Unidos.
Con esta generación debutaría en 1997 la primera caja secuencial (SMG) creada por la división M.
Con el nuevo siglo llegó la tercera generación del M3, denominada E46, la que debutó con un estilo más ancho y elegante, pero no por eso menos deportivo.
Entre las novedades que incorporaba el E46 destacaba su motor de seis cilindros y 3.246 cc, que desarrollaba 343 Hp y 365 Nm de torque, con el que obtenía una excelente potencia específica de 105 caballos por litro.
A esto sumó un inédito control de diferencial M, que ayudaba a repartir de manera más eficiente la potencia al piso, y la segunda generación de la transmisión SMG.
En 2001 BMW presentó las variantes convertible y GTR, esta última desarrollada para competir en la American Le Mans, que montaba un bloque V8 de 450 Cv, y que daría paso a una versión de calle con 350 Cv en 2002. Finalmente, la marca bávara lanzaría un año más tarde el M3 CSL, el que destacaba por su considerable reducción de peso (100 kilos menos que el M3), gracias a la eliminación de equipamiento superfluo y a la utilización de fibra de carbono.
UNA NUEVA ERA
Con el arribo en 2007 de la cuarta generación (E90/92/93) del mítico deportivo alemán, nuevamente se impuso el upsizing, ya que cambió el bloque de seis cilindros por un V8 de cuatro litros, con 420 Hp y 400 Nm de torque. Además, el auto se construyó sobre un chasis ultra ligero e incorporó, por primera vez, un techo en fibra de carbono para bajar su centro de gravedad y reducir su peso.
Pocos meses después del debut del M3 coupé, BMW estrenó las variantes sedán y cabriolet, y en 2008 presentó su primera caja de doble embrague disponible para las tres variantes. Para este año se espera la incorporación de una versión más racing homologada para la calle, GTS, que destaca por su ligero peso y motor de 450 Cv.